Ribadedeva es un concejo marino y fluvial, con historia y tradición, con gastronomía y pesca. Situado en la punta más oriental de Asturias, Ribadedeva es un municipio de pequeñas dimensiones (36 km2) que linda con la Comunidad Autónoma de Cantabria por lo que pese al orgullo que sienten sus habitantes de ser asturianos existe una clara influencia cultural vecina, influencia que otorga al municipio una especial personalidad.

Ribadedeva atesora pese a su reducido tamaño una gran riqueza patrimonial y cultural pues tiene dentro de su ámbito geográfico dos elementos que han sido declarados patrimonio de la humanidad por la UNESCO (la cueva de El Pindal con sus pinturas rupestres y el camino de Santiago del Norte que cruza el concejo de este a oeste) y otros dos elementos que han sido declarados Bien de Interés Cultural por el Principado de Asturias (el casco histórico de Colombres y su arquitectura indiana con el Archivo de Indianos- Museo de la Emigración a la cabeza y la Torre de Noriega situada en el pueblo del mismo nombre y de antiquísimo origen medieval).

Ribadedeva conserva con orgullo la huella indeleble de la emigración a América y Colombres, su capital, concentra sin lugar a dudas la muestra más completa de la conocida como arquitectura indiana. Fruto de ese pasado y de la defensa y promoción que, tanto desde las instituciones públicas como desde la sociedad civil, se realiza de esa “huella indiana” es por lo que la Fundación Princesa de Asturias el 9 de septiembre de 2015 concedió el galardón a la villa de Colombres de “Pueblo Ejemplar 2015”.

Al margen de lo anterior resulta destacable por su importancia turística la playa de La Franca, pintoresca y hermosa donde las haya, y resultan recomendables de visitar los bonitos pueblos que riegan la orografía del municipio, lugares que conservan algunos rincones inolvidables.

Ribadedeva es mágica, es un cruce de caminos, una caja de sorpresas, turismo para todas las edades. No pase de largo. Pare y disfrute. Bienvenido.